Tac, ta, tac.

Saltando alegre como un conejito, va paseando mi dedo de tecla en tecla, y con el tac, ta, tac, va marcando a ritmo como aburrido, un pequeño momento de...
Y se perdió, sin más desapareció, adiós a la inspiración, de nuevo roto sobre el teclado con sus blancas letras y sus negras teclas... descansa la cabeza, del ansioso en vano escritor.

Verdades sin mirar

Charlamos durante horas, casi como sin tener un final al que llegar, y fue en esa conversación, (que ya no tenia horas ni minutos, como tampoco nosotros teníamos relojes que nos ataran) donde al final encontré la respuesta a todo y se lo traté de explicar. No es cierto, simplemente no es cierto... Y cuando decido decirte que no es cierto, lo hago sabiendo que estoy hablando de todo en lo que crees, de todo lo que te han enseñado... simplemente es algo que dejaste que te preñaran y no lo hicieron nada mal. Nadie te dijo nunca que te estaban mintiendo y si te dicen suficientes veces la misma cosa... digamos que acabas por creerlo. Por eso ahora yo, que no tengo miedo te lo digo, nada, repito, nada es cierto.
Ni estás obligada a hacerlo, ni tampoco habrá recompensa por tu sufrimiento, y es que el hecho que te ocultan, es el como simplemente deberías disfrutar de lo que no es eterno. Son cosas frágiles, que tienden a mutar (porque nada desaparece), que siguen girando como sin sentido ni control, y es ahí donde reside la gracia, el chiste, la broma... Si vives, es para vivir, y si mueres, es por ti.