jueves, diciembre 17, 2009

Terremoto, sismo, movimiento geológico dentro o fuera del mar...

Se estremece, todo a mi alrededor se mueve como si hubiera cobrado vida, llego a pensar que alguien se esconde debajo de mi cama que ese monstruo en el que pensaba cuando era joven, como para temer a mis propios demonios adquiriendo forma en la oscuridad, ha venido a comerse el poco alma que quede dentro de mi, si es que esos monjes y religiosos tuvieron alguna vez razón...
Son segundos, pero se sienten pasar como unos pocos minutos siendo sometido a un brutal orgasmo. Se saborea cada instante, y cuando tu mente lo asimila, sólo puedes decirlo a plena voz... ¡Terremoto!
Esta pobre de la que tanto hemos abusado está cada día más loca.. la primavera ya es verano y el otoño despareció un buen día, de tanto mezclarse bruscamente el verano y el invierno..
Malos tiempos para quedarse sin dinero, ver como te quitan tu casa y querer seguir viviendo en el capitalismo...
Si te quedas sin fichas en esta partida de poker, quizás el revolverse las entrañas de la tierra, mientras duermes en un coche, pueda hacerte ver que es hora de cambiar las reglas del juego.
17 de Diciembre, y 2009 se despide avisando de que nuestros edificios no son esas cajas tan solidas que queremos pensar...

domingo, diciembre 06, 2009

Divagaciones de un marcapasos

Aquí yo solo agarrado a esta patata roja que se llena y vacía de sangre cada dos por tres... Este sitio es caliente, y dicen que soy un invento maravilloso... pero si es cierto que soy tan maravilloso..¿por qué no me usan para arreglar todos los corazones rotos?...
No pertenezco a este sitio, pero como no son capaces de mejorar, sino que sólo saben ponerse parches... supongo que no está mal echarles una mano, al fin y al cabo ellos me hicieron venir aquí, yo que sólo era una idea fantasiosa...
Quizás algún día traigan a alguien que sea capaz de ayudarles a arreglar los corazones y sueños rotos...
Aunque algunos de ellos dicen que si tienes el corazón roto sólo significa que tienes mucho que recordar...
Sigue latiendo... quedan muchos sueños que partir en pedazos....

jueves, octubre 22, 2009

Tiro en la nuca

Vivir en esta ciudad es como recibir un tiro en la nuca… al menos como me lo imagino…
Desde que volví a esta casa acomodada mi mente se ha abotargado, los cambios de humor son constantes y no puedo evitar estar casi deprimido…
Cuando salgo a la calle que es cada vez en menos ocasiones me veo aletargado, sin ganas de pasear como hacia antes, simplemente me meto en mi burbuja de acero y me muevo todo lo rápido que puedo, cuando alcanzas una velocidad en la que lo que hay a tu lado es un borrón parece que al menos no pueden hacerte daño…
La música se vuelve muy importante en una vida así, no sólo para los momentos de ocio, casi para poder respirar.
Por si fuera poco se han encargado de darme un reflejo cánido en el que ver representadas mis frustraciones… ahí lo puedo ver, metido en su espacio de vida, una terraza en la que puede cumplir sus necesidades básicas… tratando de suplir con largas siestas y un par de caricias su ausencia de libertad…
El consumo de drogas es ingente entre la juventud de esta ciudad, en otros lugares en los que he estado la gente consume drogas por diversión, no son una necesidad sino un complemento que ayuda a dar nuevas visiones y otros matices a experiencias, una forma de expandir los horizontes de lo que tus sentidos pueden darte. Aquí no, las drogas casi se han convertido en un algo tan seguro como la muerte, si quieres mantener la cordura en este sitio no te queda más que “coger un buen ciego”, para aletargar tus neuronas un mínimo… si permaneces tan despierto como puedas lo único que te espera son unas grandes ganas de que pase ese instante, esa fracción de segundo tras el tiro en la nuca que aquí se alarga sobremanera. A todos nos dieron un tiro y esperamos a que nuestro cuerpo deje de moverse, para que por fin llegue la muerte y el descanso a nuestra mente… en una ciudad llamada Huelva.

domingo, julio 05, 2009

Lamento del que no come

Sigo un rastro de estupideces buscando el final de mi vida, veo como un año tras otro sin excepción voy tomando decisiones equivocadas. Nadie tiene que decirme aquello de que la vida no es fácil, o que todos tenemos que sufrir peleando para volver a levantarnos... Pero hay días en los que no eres alguien feliz, sino una miserable figura de ojos caídos y hombros aún más caídos, que se remueve intranquila en el lugar donde trata de buscar el descanso. Pero todo aquel y toda aquella que han sentido ese picor en el cuerpo y esos sonidos inquietantes que la mente proporcionan a la sombra de lo que quisimos ser, sabe que ni por muchas drogas, entretenimientos o pensares cansados, la tortura pasará con menos sufrimiento o más ligera...

Proposición

Una enorme fila blanca se dispone ante mi como un pelotón de fusilamiento, ninguno tiene compasión y busca en la luz de cualquier punto, el rayo que se refleje mejor para clavarse deslumbrante en mis anhelos. Son una legión, organizados por tipos y tamaños, bien entrenados y de fuerza inmensa.
Han calado sus bayonetas y vienen a por mi sin compasión y sólo me queda una cosa que decir ahora que no temo nada y asumo lo que venga como un hombre: Muérdeme

viernes, enero 16, 2009

Lavado de cara

Como podéis ver los pocos que lo veréis, le he dado un lavado de cara al maltrecho blog, donde quedan trozos de bazofia que yo mismo asumo haber escrito, aparte he colocado una poesía en prosa que personalmente me gusta y un par de textos que gracias a mi querido amigo Gian Luigi han sido publicados en Como (Italia).
Espero que disfrute alguien de esta lectura.

Vendetta a la española

-Quince días reventando una a una, cada pequeña parte de su cuerpo… vertiendo lentamente lejía y sal sobre las heridas sangrantes. Parando cuando se desmayaba por el dolor, para realizarle transfusiones de sangre y continuar dándole su tratamiento al despertar… Aún así nada era suficiente para lo que ese despreciable ser merecía.

Esos eran los pensamientos de Ramón, cuando rememoraba como aquel perro había mutilado una a una, a las 3 hermanas que tanto había cuidado, y eso sólo después de violarlas…
-Ramón, esto ya ha sido suficiente. ¿No te das cuenta de la cantidad de gente que podrías haber salvado con esa sangre?, estas desperdiciando el esfuerzo de muchos sólo para hacer sufrir a uno… nadie merece lo que estás haciendo, ni los que mueren por falta de sangre para transfusiones, ni tu mismo convirtiéndote en un monstruo, ni siquiera ese desgraciado, al que ya sólo le queda un vago recuerdo, estertor de lo que era ser humano…- Ella aún sabia lo que era tener piedad, lo que era curar tanto a unos como a otros, y sólo por eso perdonaba aún su actuación. Sus ojos castaños eran como lágrimas de miel entre la suciedad de su cara, y resaltaban de una forma extrañamente bella, que hacia olvidar las manchas de sangre y restos de vísceras de su bata…

-Ni por todas las malditas almas de esos soldados soltare a ese bastardo, vivo o muerto… quedara siempre aquí, bajo el yugo de las torturas que el mismo diablo le dará cuando se me escape su vida entre los dedos. Y hasta ese momento… yo mismo me encargare de que reciba el trato adecuado a su espíritu…- Ni siquiera el diablo del que hablaba hubiera tenido esa mirada pronunciando aquellas palabras pensó ella desesperanzada…

El sonido ensordecedor, las lenguas de fuego que siseantes, lamían la noche a cientos, y el reguero incesante, macabro a fin de cuentas, de gritos de angustia, impotencia y dolor… todo simples trompetas de anuncio de la llegada de su majestad la muerte, que engalanada con carros de combate y siervos desbocados portando sus símbolos en forma de fusil, llegaba al pueblo de Ramón para cobrarse el precio de la venganza de tantos, y los impuestos de luchar por un sueño, heroico, pero sueño en aquellos tiempos, y también hoy en día…

La guerra civil de hermano contra hermano, de pueblo contra pueblo, y de vencidos y aún más vencidos, la llevamos cultivando en España desde tiempos de largo ya perdidos entre libros de historia y paginas empolvadas…

Laberinto en interiores

Rendido sobre pies de mármol, reposaba un cuerpo blanquecino, lleno de yagas supurantes y de ojos constreñidos. La sangre casi coagulada salía de su costado, de forma patética como la espuma de una botella sin gas, que llevaba abierta demasiado.

-<> -Tales fueron los suspiros, proferidos de una boca, quizás en otro tiempo de labios alegres y sonrisas inspiradoras… otros tiempos que no eran estos… no…

Esos pies de mármol, de pétrea planta y descomunal tamaño, eran antiguos miembros de un cuerpo altivo, que se habían visto convertidos en meros vestigios, de una sombra valiente que guardaba el paso, ante aquel laberinto claustrofóbico, siniestro, oscuro por no decir tenebrosamente tétrico…

-¡Entrare!... Mi malherido amigo, y no seré yo quien venda de saldo su piel, voluntad o vida. –Y con cada una de las palabras, empujé mi sangre a correr y dar impetuosas sacudidas a mis frías extremidades, que quizás por las historias, quizás por el lugar, o ¡por lo crudo del estertor!... suspiro último, del maltrecho despojo… que una vez se llamo hombre... ya no querían reaccionar…

Acera estática bajo mis pasos

EL cansancio me inunda como la llegada de soñadores en barcos de papel,

no conozco los sueños que pierdo en las noches que paso en vela,

con el malestar de mi propia compañía,

carezco de reloj y sin embargo el tiempo,

se empeña en hacerme ver como pasa demasiado rápido para mis cansados ojos,

los viajes con retorno se quedan fragmentos de mi mismo,

sacando la furia de mis entrañas y ya no se si soy yo quien grita,

o es la frustración que sale vomitada desde un rincón de mi alma,

pasar de ser amigo del mundo y risa para los entristecidos,

a ver la lejanía de la amistad,

la cercanía del desastre y lo frío,

de la acera estática bajo mis pasos perdidos.