Soy como el hijo, del nieto, de un sobrino, del cuñado de un cadaver... Uno más en una lista absurda a la que llamamos vida.
1 comentario:
Anónimo
dijo...
Tío, soy el Jumy. Hacía tiempo que no visitaba tu blog. Me alegra ver de que sigues llevándolo adelante. Lo que sí siento es no visitarlo tan a menudo como debería. Bueno, que sólo era eso y... a ver cuándo despejas las penumbras de tu poesía, que sólo hablan de muerte y negrura. Espero que estar en la carrera que te gusta te de algo por lo que escribir una alegría. Un abrazo.
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Tío, soy el Jumy. Hacía tiempo que no visitaba tu blog. Me alegra ver de que sigues llevándolo adelante. Lo que sí siento es no visitarlo tan a menudo como debería. Bueno, que sólo era eso y... a ver cuándo despejas las penumbras de tu poesía, que sólo hablan de muerte y negrura. Espero que estar en la carrera que te gusta te de algo por lo que escribir una alegría. Un abrazo.
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